Es un juego perverso de dominio-sumisión que cuando se mantiene de forma prolongada da lugar a procesos de victimización, y de deterioro moral del acosador.
El acoso escolar consiste en hacer daño a un compañero o compañera de forma intencionada y repetida, utilizando cualquiera de las siguientes formas de agresión:
– Verbales: Poner motes, tomar el pelo, amenazar, hacer burlas, hablar mal de otros, insultar, despreciar, provocar, amedrentar.
– Físicas: Golpear, empujar, dar una patada a otro, arrojar cosas, quitar, romper o esconder las pertenencias de alguien, hacer muecas o gestos de desprecio.
– Sociales: Excluir a alguien, difundir rumores, aislar, ignorar, humillar, extorsionar.
– Sexuales: Molestar, hacer tocamientos sin consentimiento, hacer burlas del cuerpo, la intimidad o la orientación sexual de otro.
Víctima de Bullying

El estudiante o la estudiante que es violentado y se encuentra en la posición de víctima, puede poseer características diferentes al resto del grupo, las cuales son utilizadas por el estudiante o la estudiante que agrede para generar el bullying.
Por ejemplo, algunas de estas características pueden ser:
• Color de piel, estatura, peso, tipo de cabello.
• Intereses particulares: hobbies, música, forma de vestir, juguetes, juegos y deportes.
• Rendimiento académico: muy inteligente o con malas notas. • Nacionalidad, religión, situación socioeconómica.
• Algún tipo de discapacidad o situación de salud: aparato de corrección visual, dental u ortopédico.
• Identidad de género u orientación sexual.
• Por las personas con las que se relaciona. •
Por que se cree que es preferido o por ser más regañado, o señalado por la maestra/o, profesor/a.
Perfil Acosador

Es choteador/a, se burla, tiene una actitud excluyente, es manipulador/a.
• Es posible que haya sido testigo de algún tipo de violencia en el ámbito familiar, educativo y comunal, por lo que la violencia es una conducta aprendida y erróneamente percibida como normal.
• Tiene influencia sobre otras personas. Puede ser líder/esa y su poder es validado dentro del grupo.
• Es impulsivo/a y confrontativo/a, carece de empatía y se le dificulta el autocontrol.
No tienen tolerancia a la frustración.
• No tiene amigos/as, sino seguidores/as que le tienen miedo y/o lo respetan.
• Tiene una promesa de protección para sus seguidores/as.
• No selecciona a la víctima al azar
¿QUÉ HACER ANTE EL ACOSO ESCOLAR?
Si observas que un compañero o compañera acosa a otro niño o niña:
• Puede que sientas miedo o rechazo ante esa situación, pero actúa.
• Si ves que tú solo no puedes ponerle freno y que no es lo más conveniente; pide ayuda a un adulto. Esto no es chivarse, es ser solidario con quien lo necesita.
• Apoya al compañero o compañera que está siendo acosado. Nadie merece que le traten mal. Si agredes a algún compañero o compañera:
• Pregúntate: “¿Qué es lo que me sucede?, ¿por qué me hace gracia o me siento más fuerte cuando molesto a otras personas?”
• Piensa cómo se debe sentir la persona a la que le estás haciendo daño. • Habla de lo que te sucede con algún adulto. Alguien que te escuche y te ayude.
• Controla tus emociones para que éstas no te controlen a ti. La violencia no es una buena manera de responder. Ante las situaciones que te disgustan o te provocan enfado:
1. Toma distancia física de la persona
2. Respira profundamente varias veces.
3. Imagina que la rabia se vuelve un papel y lo tiras a la papelera. Cuando te sientas más calmado, habrás ganado tiempo para pensar en lo sucedido y entonces estarás preparado para hablar con la persona. Si un compañero o compañera te hace daño con frecuencia y durante un cierto tiempo:
• Es posible que te sientas triste, temeroso, avergonzado y culpable, porque sufres una situación injusta.
• No guardes el secreto. Si hay algo que te hace daño, no te lo calles. Hablarlo no es chivarse, es exigir el respeto que todos merecemos.
• Cuéntalo a tus padres o algún adulto de confianza. Es importante que lo cuentes en el colegio. • Procura no estar solo y evita situaciones o lugares que puedan ser arriesgados.
• No respondas de la misma manera, es decir, agrediendo.
• En el momento en el que te hacen daño crea un escudo imaginario a tu alrededor que te proteja. Todo lo que te están diciendo rebota como una pelota. Respira, piensa que eres fuerte.
• Todos tenemos derecho a ser protegidos contra cualquier forma de violencia y a ser tratados con respeto.
